lunes, 19 de octubre de 2009

Películas: Soy un cyborg

I'm a cyborg, but that's ok

Es el título original de la película. Quien dice película dice cuento, dice una historia que sigo llevando conmigo desde que la vi.


Y si ella es un cyborg...pues "ok". Está bien. Qué más les dará a los demás si de verdad funcionas con batería recargable o solo funcionas así en tu cabeza. A veces, lo que sucede en la cabeza es más importante. Al fin y al cabo, te comportas como una cyborg, piensas como una cyborg, vives como una cyborg: eres una cyborg. Aunque te internen porque se empeñen en no aceptarlo. Lo eres, y lo sabes. Y yo también lo sé, y lo sabría aunque no hubiera visto tus dedos del pie iluminándose según el nivel de carga de la batería.

Y tú...sí, te hablo a ti, el chico de las máscaras de colores. Hacía tiempo que no me encontraba con un personaje como tú. Lo tienes todo para encantarme, eres muy distinto. Para los que no le conozcáis, os hago una breve presentación: se lava los dientes de forma compulsiva incontables veces, cuando habla de su madre, que le abandonó, saca del bolsillo la foto que tiene de ella y la enseña como si fuera una placa de policía. También, a veces anda de cuclillas. Observa a la gente, y decide robarles algo. Siempre en contra de su voluntad, claro, sino, no puede robarles nada. Pero no es un ladrón cualquiera. Roba cosas como la compasión, la educación, la forma de andar o una buena forma de jugar al ping-pong, aunque eso le acarree picores. ¿Quién quiere robar una toalla, por ejemplo, cuando puedes robar ese tipo de cosas? Y a mí, no sé qué me robó en una de las escenas más bonitas que he visto, en una de las demostraciones de amor más originales y preciosas - sin palabras ni frases hechas, que no hacen falta - que he visto; que cada vez que la recuerdo, me emociono.

Qué importa que mucha gente piense que es una película muy rara, que no les gusta, que no es buena. Es una de esas historias que, copiando al chico ladrón, he cogido para hacerla mía. Y como yo creo, pienso y actúo como si fuera mía, es mía. That's ok.



Al fin y al cabo, hasta los cyborgs necesitan encontrar su razón de existencia... Quiero decir, hasta los humanos lo necesitan. Menos mal que Park Chan Wook encontró la suya y nos regala su cine. Al menos, a mí, me lo regala. O se lo robo, no sé. Pero cuando termino de ver una historia así, tan bonita, tan triste en parte, pero que luego la tristeza se marcha para dejar paso a la esperanza y a esos momentos tan preciosos; esos detalles que Park Chan Wook se inventa para dejarme sin palabras, sorprendida e hipnotizada; tan original, tan única... los dedos de mis pies están de todos los colores posibles, los froto para elevarme y pienso que comunicarse con un teléfono fabricado con vasos de plástico y un hilo es de las cosas más maravillosas del mundo.

2 comentarios:

  1. Jo me he emocionado leyendote y todo...la vere si o si xD

    ResponderEliminar
  2. la vi.... la vi... la e visto porfin... i es preciosa... a kien le importa si nuestro mundo es tan distinto del suyo??... Reclamando el derecho a un mundo propio...

    me pondria a contarte mi vida... pero mejor no... creo ke esto es lo genial de esta peli... parece ke este aciendo un psicoanalisis sentimental... como puede estar tan cerca un mundo tan loco y magico de la realidad???... o kizas sea mejor de Mi realidad???

    ResponderEliminar